Cuando escuchamos la palabra seducción son muchas las ideas que nos vienen a la cabeza, y muchas las emociones que nos llegan al cuerpo, la mayoría de las veces, sin que nos demos cuenta.
¿Soy seductora? ¿No lo soy? ¿Qué me ocurre internamente cuando alguien me gusta? ¿Por qué siempre reproduzco la misma situación? Y si luego me rechaza ¡¿qué será de mí?!
El doble mensaje que recibimos de la cultura heteropatriarcal, que nos empuja a ser seductoras y a la vez nos condena por manipuladoras, nos confunde. Esto hace que, frente a nuestro propio deseo, perdamos nuestro centro, volcándonos en la otra persona o bien a retirándonos a un falso rincón de seguridad.
De este modo, el acto de seducir se transforma de algo propio y personal a un campo de batalla que amenaza nuestra autoestima y nuestro disfrute. ¿Vale la pena? ¡Mejor que valga el placer!
En este taller, desmenuzaremos los mandatos culturales para llegar a ver cómo nos llevan a formular mensajes incoherentes, tanto a nivel interno como externo.
Exploraremos los mensajes verbales y no verbales, las fantasías, los rituales que ponemos en juego para preguntarnos cuáles de éstos realmente son nuestros y cuáles nos obligan a jugar en un terreno ajeno.
Nos daremos la posibilidad de explorar nuestra personalidad, reconociendo que muchas veces sólo percibimos y mostramos una parte limitada de todo lo que somos.
Trabajaremos la forma de gustarnos a nosotras mismas, de seducirnos y darnos cuenta de cómo seducimos, dándonos la libertad de experimentarnos y de reconocer nuestra autenticidad. Todo ello, lo haremos desde un lugar de juego, goce y placer, pasando por el cuerpo y por las emociones.
¡Porque no hay nada mejor que seducirnos a nosotras mismas!
Encontrarás más información en este documento: Presentacion_Seduccion_2016.pdf